El pasado jueves 26 de mayo mis compañeros de grupo y yo tuvimos la grata oportunidad de presenciar y disfrutar el gratificante y mágico punto medular de la radio en México.
Mi nombre es Alexis de La Cruz y éste es mi reporte sobre la visita al Instituto Mexicano de la radio.
Todo comienza desde que, una vez registrando nuestros datos con los guardias para ingresar, nos recibe una muy agradable chica quien nos indica el camino a seguir hacia el magnífico "Estudio A"; el cual, cabe mencionar que es el estudio de grabación radiofónico más grande de toda Latinoamérica y que una de sus singularidades (aparte de el sinnúmero de exitosos artistas y compositores que ha albergado) es que, para generar la acústica y ambiente propicio, el estudio está situado sobre una extensión de casi 6 metros de profundidad de agua.
Justo antes de entrar a la gigante y magistral cabina de grabación nos pasaron por una puerta que estaba a la derecha de la entrada del mismo, dicha puerta resultó conducir a la sala de controles en donde encontramos un par de pantallas, ecualizadores a modo de un gabinete enorme lleno de botoncitos muy curiosamente acomodados en orden junto a varios foquitos de colores verde amarillo y rojo que mostraban las frecuencias de onda que podrían estar ocurriendo dentro del estudio, ahí nos fue presentado el maestro
Javier Platas Jaramillo, Doctor en radio, quien es conductor de varios programas en Opus 98.5 y era uno de los presentadores del programa al que estábamos por entrar a ser partícipes.
En los minutos previos a iniciar la grabación del programa, el maestro plantas nos condujo por una serie de preguntas y respuestas en un modo de ronda, de tal manera que nosotros como alumnos pudiéramos hacer algunas de las preguntas que teníamos para el medio en cuanto a lo radiofónico y en cuanto a su carrera y saciar la curiosidad del momento por estar ahí y así, de una manera bastante amable respondió el a nuestras dudas abriéndonos los caminos del conocimiento dentro de ese estudio con un par de anécdotas de su tiempo en funciones dentro del medio.
Acto seguido nos pidieron que saliéramos de la sala de controles y bajamos por unas escaleras cuyas conducían al espacio radiofónico de grabación ahí nos indicaron que tomáramos asientos en una parte que daba al lado izquierdo de los músicos y en otras sillas que rodeaban el "stage" estaba un grupo de chiquillos aproximadamente de kínder y primero de primaria muy animados por atender a la música que estaba por sacudir nuestros sentidos alimentando nuestra alma, regresando a nosotros como universitarios, a la misma edad que aquellos niños de la mano del Maestro Platas, la Maestra Gabriela Carrera y Los Muchiquillos!
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